jueves, 20 de enero de 2011

EN CUESTIONES DE SEXO.....

                      Se sentó como hacía a diario delante del caballete, unos trazos dados de cualquier manera, hicieron que se desesperase y al poco rato se levantó. Caminó por la casa durante un rato y se decidió a salir a dar un paseo, quizá el aire fresco la espabilase un poco y aclarase sus ideas. Se arrebujó en su jersey grueso y usado y se encaminó al antiguo muelle, en donde de pequeña siempre iba con su padre.
                        El olor a gasoil y pescado viejo le trajo recuerdos de otros tiempos, barcos de pesca, ocupaban el muelle, ya casi sin utilizar, esperando que armadores o patrones, pagaran lo que debían, para marineros de países lejanos volver a su tierra. Llegó hasta donde estaba el faro, se erguía alto y ausente de vida, su luz se había apagado hacía años, en que lo habían sustituido por otro de mayor tamaño y en otro lugar.  Miró hacia uno y otro lado, pero no vio a nadie. Entonces se dirigió hacia uno de los sucios barcos mas cercanos y paseó por delante, un marinero que fumaba en la borda la vio, ella, le sonrío y el tirando el cigarro al mar, empezó a bajar la escalerilla.
                            Así eran sus gustos. No se conformaba con hombres de su mismo nivel, necesitaba otra cosa. Los capturaba en sitios cuanto mas sórdidos mejor, sabía que un día eso sería su perdición, pero se arriesgaba.
                         Su siguiente exposición, fue un absoluto éxito, nadie podía imaginar que detrás de toda aquella parafernalia, había una persona que frecuentaba los bajos fondos. Una semana después, un hombre, que llevaba un camión, la recogió en una carretera malherida, era una zona frecuentada por prostitutas, aquella forma de corrupción de si misma, también hizo que adquiriera enfermedades que no sabía que tenía. 

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