viernes, 29 de julio de 2011

Maltrato sicológico.

                                 Con la seguridad que da saberse guapa, iba Lilian por la vida. Pelo corto, muy rubio, cuerpo delgado y esbelto y una altura superior a la media. Estudió diseño, pero trabajaba de relaciones públicas de una empresa. Lo hacía bastante bien, satisfechos con su trabajo, en poco tiempo le aumentaron el sueldo y le hicieron un contrato indefinido. Lilian se sentía feliz con lo que había conseguido, tenía muchas expectativas puestas en su trabajo. 
                             Conoció a Moisés en la misma oficina, empleado hacía ya cinco años, era encargado de ventas. Le gustó en seguida. Fisicamente, llamaba la atención por su buena presencia, alto, moreno de facciones interesantes, su carácter era quizá demasiado reservado para su gusto, por lo demás, lo veía perfecto.
                             Y se dedicó a su conquista con tanto entusiasmo, que empezaron a salir un mes más tarde. Para ella, la primera relación seria que tenía, para él, no. El año de noviazgo fue el mejor de la vida de Lilian, cada uno dio lo mejor de si, pasaban los fines de semana en el apartamento de Moisés en la playa, aislados del mundo, uno para el otro. Lo irse a vivir juntos fue idea de ella, compartir casa, formar una familia, lo vio natural. A Moisés, no le pareció ni bien ni mal, simplemente quería casarse y aunque ella no era muy partidaria del matrimonio, aceptó.
                              Las dos familias, encantadas, les auguraban el mejor de los porvenires. Al año de casada, Lilian se quedó embarazada. Se sentían felices con la llegada de un hijo. Cuando el niño nació, Moisés habló seriamente con Lilian para que dejara el trabajo, quería que se quedara en casa a cuidar del niño. Ella se negó en rotundo, tenía un puesto privilegiado y pensaba conservarlo. Entonces empezaron los problemas. Discusiones a diario, impedimentos para cualquier cosa que ella quisiera hacer. La negativa fue el inicio de que una vida que parecía de lo más placentera, se convirtiera en un esfuerzo para intentar satisfacer a su marido, el carácter de éste, cambió de una manera brutal, se hizo frío y distante, dominante e incluso mezquino.
                                 Conocer aquella faceta de la vida de Moisés, le supuso un fuerte impacto, al principio pensó que sería algo pasajero, según fue pasando el tiempo, se dio cuenta que la sometía a un terrible maltrato sicológico.

                             
Mi pregunta es: ¿ Que haría usted si fuera Lilian ?.
                               


No hay comentarios:

Publicar un comentario

Hola, gracias por dejar sus comentarios, prometo contestar a todos. Besos, Maca.