sábado, 29 de enero de 2011

Y SÓLO LE DIJE, ADIÓS.


Posted by Picasa Habíamos tenido un día de tanto trabajo, que a nadie se le ocurrió decir, como solíamos hacer los fines de semana, lo de irnos a tomar algo a la cafetería cercana, sino que cada cual partió hacia su casa deseando descansar un rato. Pero mi compañera de mesa más cercana, Victoria, era casi de mi misma edad, las mas jóvenes de la oficina y no se si sería por eso, que no nos sentíamos tan agotadas como el resto. Nos encontramos en el aparcamiento y decidimos ir a tomarnos una copa, no era demasiado tarde, así que quedamos en encontrarnos en uno de los bares de moda. 
                        Lo estábamos pasando de miedo, Victoria era muy divertida y simpática, pero a mitad de la noche, se marchó con un chico que había conocido. Me quedé allí sola, con mi copa y mirando en derredor, la gente bailando y riendo. Se me acercó un hombre algo mayor que yo, entablamos una conversación de lo más entretenida y quedamos para vernos al día siguiente. 
                          Almorzamos juntos, a la luz del día, no me pareció que fuera tan mayor, era de lo más agradable y simpático. Y sin darme cuenta, empecé una relación. No sabía si era algo serio, lo que si sabía era que estaba a gusto. 
                          Pero cuando llevábamos unas cuantas semanas de salidas casi diarias, aquel hombre, me hizo la confidencia de que tenía una pareja estable, matarlo me pareció poco. Me levanté del restaurante en donde nos encontrábamos y mirándolo a los ojos, sólo le dije, adiós.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Hola, gracias por dejar sus comentarios, prometo contestar a todos. Besos, Maca.