viernes, 24 de septiembre de 2010

AMISTAD IMPOSIBLE

                                        Pueril e ingenuo, a veces pecaba de un tanto recatado. No eran adjetivos apropiados para un hombre, que, como él, medía casi metro ochenta y pasaba muchas horas en el gimnasio. Pero su carácter tímido, lo había llevado a ser de esa manera, de modo que le resultaba harto complicado relacionarse con el resto del mundo. Pero sin querer, hizo amistad con otro chico del gimnasio, era su antítesis pero se llevaban bien. 
                            Jorge, era prepotente y extrovertido, hacía amigos con facilidad y ni siquiera fisicamente se parecían, pues era pequeño, aunque todo músculo. Pero espiritualmente no coincidían en casi nada, de alguna manera, aquella amistad tenía que terminar de forma desagradable, pues lo que uno veía de un color, el otro lo veía de otro.
               Un día de verano, caluroso y soleado, decidieron ir al lago cercano, acamparon durante varios días. Las noches largas y bochornosas hicieron mella en ellos, no soportaron la convivencia de sólo dos, por lo que empezaron las discusiones sinsentido y los argumentos acalorados, se contradecían y armaban bronca por cualquier trivialidad, así que en un momento de ira, llegaron a las manos, empezó una pelea absurda, golpes y más golpes, uno de los dos cayó al suelo malherido, mientras el otro aterrorizado, salió huyendo.
                        Era de esperar, no podía ser. Entre los dos la amistad era imposible.

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