martes, 13 de septiembre de 2011

Mentiras.

                 Era casi imposible saber lo que había de cierto en lo que contaba. Mentiroso compulsivo. Mentía a todas horas y por los motivos más simples.
                 No sé en que momento empecé a darme cuenta de su verdadera personalidad, pero desde ese instante, desconfié de cualquier cosa que decía. Hasta que un día, leí algo que me hizo recapacitar:







                              Unas hermosas frases:
            "Una mentira nunca vive hasta hacerse vieja"
              " Con una mentira suele irse muy lejos, pero sin esperanza de volver."
                  

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